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Se denominó «Barrio Padre Rodolfo Ricciardelli» al conjunto urbano conocido como Villa 1-11-14
En el marco de las funciones de la Legislatura Porteña y mediante una ley aprobada por unanimidad en segunda lectura, el Cuerpo Parlamentario de la Ciudad de Buenos Aires denominó «Barrio Padre Rodolfo Ricciardelli» al conjunto urbano conocido como Villa 1-11-14 que se encuentra en el Bajo Flores – Comuna 7. Numerosos vecinos y asociaciones propiciaron esta denominación sobre la que el Consejo Consultivo Comunal 7 oportunamente se expidió a favor en forma unánime.
La nomenclatura fue asignada al espacio delimitado por las avenidas Varela, límite del Club Daom, Coronel Esteban Bonorino, Riestra, Presidente Torres y Tenorio, las calles José Barros Pazos, Agustín de Vedia, Coronel Martiniano Chilavert, deslinde entre la parcela 20 y la Fracción A con la Fracción 34 c de la Manzana 2T Sección 44 y las avenidas Gral. Francisco Fernández de la Cruz y Perito Moreno.
Ricciardelli misionó entre los más pobres de esa zona desde el año 1968 y luego fue designado párroco de «Santa María Madre del Pueblo», primera fundada en una villa de emergencia por Monseñor Jorge Vernazza. Eligió esa comunidad para vivir y se comprometió con sus causas reivindicativas de dignidad y justicia desde el 1 de abril de 1999 cuando por entonces integraba el Equipo Pastoral en las villas de emergencia. Junto a Vernazza y un grupo que los ayudaba formaron la cooperativa de viviendas “Madre del Pueblo” con la que asistieron a la construcción de varios barrios en el gran Buenos Aires, posibilitando el acceso a una vivienda digna a muchas familias.
Murió el 13 de julio de 2008 y el entonces Arzobispo de Buenos Aires, Jorge Bergoglio -hoy Papa Francisco- presidió secundado por sus obispos auxiliares la misa exequial. El féretro fue trasladado a pie hasta el cementerio y sus amigos, compañeros y vecinos el 13 de julio de 2010 lo exhumaron para depositarlo en el templo desde donde realizó su servicio pastoral.
Había nacido el 29 de mayo de 1939 y fue ordenado sacerdote católico en la ciudad de Buenos Aires el 22 de septiembre de 1962. Licenciado en Teología por la Pontificia Universidad Católica Argentina «Santa María de los Buenos Aires», fundó junto a otros pares el Movimiento de Sacerdotes del Tercer Mundo. Se desempeñó como vicario cooperador de «Santa Elena» entre los años 1962 y 1968 y acompañó por más de treinta años a las comunidades pobres del Bajo Flores, en especial a la Villa 1.11.14, denominada así por la fusión de tres asentamientos originales, siendo la más grande de nuestra ciudad.
Los fundamentos del despacho elevado al Pleno por la Comisión de Cultura destacan que «dedicó su vida a vivir en las villas de emergencia, consustanciándose con el modo cotidiano de su gente y trabajando denodadamente en ese lugar, expandiendo su mirada atenta y su mano generosa a todos los que la necesitaran, con profundo compromiso religioso y social».
Un grupo de estudiantes que investigó la historial barrial en 2013 reafirmó las inquietudes vecinales y ese mismo año la Junta Comunal emitió una resolución para promover una acción legislativa. Cinco años más tarde alumnos de la Escuela de Enseñanza Media N° 3 -D.E. 19- » Carlos Geniso» retomaron la temática de la identidad barrial y el Cuerpo de Delegados junto al Centro de Estudiantes, inspirados en la vida de Ricciardelli y su legado fortalecieron la propuesta de nomenclatura. A causa de ello en mayo del año 2018 la Comuna 7 presentó un proyecto parlamentario al que se agregó otro similar de la diputada María Rosa Muiños (BP). En marzo del corriente año el señor Zenon Quispe Itamari formalizó recomendaciones de miembros del Cuerpo de Delegados de la Villa 1-11-14 y del actual cura párroco, argumentando que «Desde el año 2014, venimos utilizando el nombre de «Barrio Padre Rodolfo Ricciardelli» para nuestras distintas presentaciones ante los diversos organismos y/o instituciones». El proyecto fue hecho propio por la diputada Paula Andrea Penacca (UC).
Sobre la denominación también se había expedido favorablemente la Comisión Permanente de Nomenclatura Urbana y la Audiencia Pública efectuada el 10 de septiembre último.
Por estos días se encuentra avanzado un proyecto del escultor Alejandro Marmo -creador del proyecto «Arte en las Fábricas»- para instalar en la intersección de avenidas Varela y Perito Moreno un retrato hecho con metales del padre Ricciardelli.
Nuevas integraciones al Patrimonio Cultural
La Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires declaró este jueves bien integrante del Patrimonio Cultural en los términos del artículo 4, inc. a) de la Ley 1227, al Centro Cultural y Biblioteca Popular «Carlos Sánchez Viamonte» y su acerbo bibliotecológico situado en Austria N° 2154/56. La iniciativa aprobada por unanimidad fue de los diputados Christian Bauab y Omar Ahmed Abboud (VJ).
El edificio originalmente “Casa del Pueblo de Recoleta” en sus comienzos fue sede de los “Recreos Infantiles”, iniciativa de Fenia Cherkoff de Repetto y María C. de Espada, una de las primeras experiencias de guarderías para los hijos de obreros. Durante la Segunda Guerra Mundial allí funcionó el movimiento antifascista “Acción Argentina” y su órgano de prensa “Argentina Libre”. En 1941 fue sede de la Unión Feminista Argentina que presidió la Dra. Alicia Moreau de Justo y luego allí se fundó el Sindicato de Lavanderas. Desde el 2009 es “Sitio de Interés Cultural de la Ciudad de Buenos Aires” y actualmente la Biblioteca cuenta con más de 7500 volúmenes catalogados y una videoteca de más de mil películas en DVD. La Comisión de Preservación del Patrimonio Histórico Cultural de la Ciudad de Buenos Aires avaló la declaratoria y la Audiencia Pública se realizó el 17 de septiembre pasado.
También recibió idéntico reconocimiento el mural «Levantando anclas» de Benito Quinquela Martín, que se encuentra en el Aula Magna de la Facultad de Odontología de la Universidad de Buenos Aires. El proyecto de ley fue presentado por la diputada PatrIcia Vischi (Ev) y aprobado sobre tablas.
Mediante la técnica óleo y cera sobre celotex, realizado por el famoso artista boquense en el año 1939, visualiza el trabajo en el Puerto al cual le dio identidad. Originalmente resultó una donación del autor para el Círculo Médico Argentino y el Centro de Estudiantes de Medicina.