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Mercados Internacionales: Se reanudó la exportación de gas a Chile tras once años
Después de once años, la Argentina volvió a exportar gas a Chile gracias a las inversiones realizadas en Vaca Muerta, provincia de Neuquén, y también a los excedentes de los primeros 18 meses de explotación de ese yacimiento, según informó el Ministerio de Energía de la Nación.
A través de la resolución 104, publicada en el Boletín Oficial, se habilitó el Procedimiento para la Autorización de Exportaciones de Gas Natural.
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De este modo, se creó un régimen expeditivo, transparente y no discriminatorio de otorgamiento de permisos de exportación de gas natural para convenios de corto y largo plazo, firmes e interrumpibles, y exportaciones estivales e intercambios operativos, siempre condicionados a la seguridad de abastecimiento interno.
La resolución 265 del 24 de marzo de 2004, de la ex secretaría de Energía, había suspendido la exportación de excedentes de gas natural a Chile ante el inicio de la crisis energética.
El acuerdo permitirá enviar hasta 22 millones de metros cúbicos diarios de gas y abre la posibilidad futura de comercializar -también desde la Cuenca Neuquina- petróleo crudo con decenas de miles de barriles diarios.
Desde el Ministerio se señaló que la reanudación de las exportaciones son una señal de que se está en el camino correcto para el desarrollo de unos de los grandes recursos hidrocarburíferos del país.
PALABRAS DEL PRESIDENTE DE LA NACIÓN, MAURICIO MACRI, DESDE VACA MUERTA, PROVINCIA DE NEUQUÉN
Estoy en Vaca Muerta, una de las formaciones de gas más importantes del mundo para darles una noticia muy importante: después de muchos años de producción decreciente de gas, juntos logramos revertir la tendencia, y la producción de gas volvió a crecer. En el primer trimestre de este año – gracias a Vaca Muerta – produjimos más de 3 por ciento más de gas, que hace un año. Desde el 2011 que no teníamos una producción tan alta, y en abril los niveles de producción serán superiores.
Hoy al mirar este lugar lo que vemos es desarrollo es movimiento, es producción, es empleo, es crecimiento para los neuquinos y para todos los argentinos, es energía para poner en marcha los hogares, las fábricas, las empresas y los comercios. El proyecto Vaca Muerta es exitoso porque trabajamos juntos; yo personalmente me preocupé, hace dos años, de convocar al gobernador de la provincia de Neuquén, empresas, sindicatos, trabajadores para sentarnos en una mesa a dialogar y trabajar en equipo; ese es el camino: poner el problema en el centro y no parar hasta solucionarlo y que cada parte ceda algo para que gane el conjunto de los argentinos.
https://www.youtube.com/watch?v=8ARe23vDXq0
Es muy importante que sepamos todo lo que estamos avanzando juntos en algo tan importante como la generación de energía, porque falta mucho por hacer. Hoy, con todo lo que estamos haciendo, todavía no nos alcanza para cubrir la demanda que es muy alta. Por eso, también les quiero hablar de lo que podemos hacer entre todos para cuidar esa energía.
Como siempre les dije mi compromiso con la verdad es innegociable, porque los respecto, porque ustedes confiaron en mí y estoy acá por ustedes. Cuando llegamos heredamos un Estado que gastaba y todavía gasta mucho más de lo que le ingresa y con impuestos, que son los más altos de América latina. Ahí pueden ver, el 2017, el Estado Nacional tuvo ingresos por casi 2 billones de pesos, que vienen mayormente de los impuestos y gastó 400.000 millones de pesos más de lo que le ingresó, 400.000 millones de pesos, sí. Dentro de los gastos uno muy grande son los subsidios a la energía, que fueron de 125.000 millones de pesos y la verdad es que los subsidios no son gratis, como nos hicieron creer durante muchos años. Esa es la mentira que más daño nos hizo, la energía no es gratis, la energía cuesta, porque cuesta producirla, cuesta transportarla y cuesta hacer que llegue a cada casa, a cada escuela, a cada fábrica, a cada hospital de nuestro país. Es mentira que los subsidios al gas y la electricidad no los paga nadie, los pagamos todos con más inflación y con deuda, porque para pagar la energía tenemos que pedir plata prestada, lo que nos genera una deuda a futuro, que van a tener que pagar nuestros hijos y nietos. Esa es la mochila que les estamos dejando.
Para cubrir esos subsidios nos tuvimos que endeudar; la otra alternativa hubiese sido hacer un shock de ajuste y ese no es el camino que elegimos. Elegimos el camino del cambio con gradualismo, para que ningún argentino se quede detrás y para que ese gradualismo sea posible todos tenemos que hacer un esfuerzo en este gran desafío que encaramos.
Desde el Gobierno Nacional ya empezamos, estamos haciendo las obras que hacen falta para tener más energía, también estamos construyendo 4 gasoductos, para llevar gas a lugares donde no llegaba y porque 4 de cada 10 argentinos todavía siguen sin tener gas de red. Y estamos acompañando con la tarifa social a 1 de cada 4 hogares, en todo el país.
Las empresas distribuidoras también están haciendo su parte, están avanzando las obras que estaban pendientes desde hace mucho tiempo y desde el año pasado, hasta el 2021 están invirtiendo más de 8.000 millones de pesos cada año.
Y hoy les quiero pedir a todos los municipios y gobiernos provinciales que eliminen los impuestos que cobran sobre los servicios públicos, así van a ayudar a aliviar la carga de cada consumidor, cada comercio y cada Pyme. Pero la única manera de lograr un cambio profundo y verdadero es que todos los argentinos asumamos el desafío de consumir menos. Esta es una de las misiones más importante que tenemos que encarar juntos: consumir menos energía. Cada luz que apagamos, cada hornalla, cada canilla que cerramos todo suma. Sin energía no podemos seguir creciendo, con energía no nos pueden parar.
Por eso vine acá, a pedirles que todos tomemos la responsabilidad de este desafío, porque cuidando el consumo de gas y electricidad, también vamos a cuidar la factura y no es un desafío imposible.
Veamos lo que consumen, lo que pagan – por ejemplo – nuestros vecinos los chilenos y los uruguayos en comparación con nosotros. Ahí hay un gráfico de electricidad: en electricidad los argentinos estamos consumiendo 52 por ciento más que los hogares de Uruguay y más del doble, que en Chile, pero pagamos un 40 por ciento menos que los chilenos y casi la mitad de lo que pagan los uruguayos. Eso significa que aun sin subsidio nuestra tarifa eléctrica seguiría siendo muy baja en comparación con las de nuestros vecinos.
Si vemos el gas: el gas, en Buenos Aires, estamos consumiendo 70 por ciento más que en Montevideo y Santiago de Chile, a temperaturas similares, claramente, pero en Uruguay lo pagan 134 por ciento más caro que nosotros y en Chile 3 veces más que nosotros. Sin subsidios nuestra tarifa aun seguiría siendo mucho más baja que la de nuestros vecinos; igualmente gracias a lo bien que vamos con el proceso de desarrollo de Vaca Muerta y otras formaciones rocosas y las energías renovables nos estamos preparando para ser grandes productores de gas. Por eso nunca vamos a llegar a pagar las tarifas de Chile y Uruguay, pero sí tenemos que consumir menos, como ellos, para que la factura no sea alta.
Sé lo que pesa una actualización de tarifas; sé lo que pesa en el bolsillo de cada uno de ustedes. Entiendo lo que les pasa, sé que no es fácil. Si hubiera habido otra manera, créanme que lo hubiera hecho, le di vueltas y más vueltas y no hay otra forma. Si hubiera existido algún otro camino lo hubiera tomado; qué más quisiera yo que los argentinos tengan todo y más fácil. Como les dije, yo estoy acá por ustedes. Todos los días me levanto pensando qué más puedo hacer para que cada uno de ustedes pueda estar mejor, porque el único objetivo que tengo, en este momento de mi vida, en que soy su Presidente, es que puedan tener la libertad de elegir la vida que quieren llevar.
Estoy convencido que si cada uno pone su parte y entre todos empezamos a bajar el consumo de gas y electricidad vamos a lograr tres cosas: por un lado, vamos a reducir las factura y pagar menos; además vamos a cuidar el ambiente y por último no le vamos a dejar deudas a nuestros hijos y nietos, porque la energía que estamos consumiendo de más la tenemos que importar y ese costo se transforma en deuda, que van a pagar ellos. Desde hoy van a poder ver avisos que van a ir explicando todas las cosas simples, que podemos hacer, para ahorrar energía y así pagar menos.
Creo en el enorme futuro que tenemos por delante y en el camino, que estamos recorriendo juntos, porque esta vez elegimos ir por el camino de la verdad, que lleva a soluciones reales, no hay prueba más grande de lo que podemos hacer que todo lo que ya estás pasando. Sé que a muchos les cuesta creer, porque muchas veces nos dijeron algo que no era, pero esta vez es en serio, juntos estamos dando pasos nuevos, firmes y seguros para seguir mejorando, para seguir avanzando, para seguir creciendo.
El año, que terminó, logramos muchas cosas, juntos generamos más de 500.000 puestos de trabajo y logramos que más de 5.000 personas, por día, salieran de la pobreza. Empezamos el año batiendo récords de cemento, asfalto, motos, turismo, vuelos, y ya llevamos 7 trimestres seguidos de crecimiento. Eso es algo que no pasaba hace mucho tiempo, en 15 sectores productivos, 13 están creciendo de la mano de la construcción que tomó impulso por los créditos y la obra pública, que avanza en nuestro país. Casi 10.000 personas por mes acceden a un crédito para comprar su casa; tenemos en marcha el plan de infraestructura más importante de nuestra historia y ya empezamos a terminar las primeras obras que iniciamos. Este año vamos a terminar una obra cada tres días, sí escucharon bien: cada tres días va a estar terminada y lista una obra, obras que le va a cambiar para siempre la vida a millones de argentinos. Todo esto está pasando y es verdad, está pasando por una única razón: los argentinos juntos decidimos cambiar, decidimos enfrentar la verdad para poder encontrar soluciones en serio. Si pudimos avanzar en todas estas cosas, si pudimos generar mesas de diálogo y darle impulso a este lugar maravilloso, si supimos evitar una crisis y empezar a sentar bases para crecer; si pudimos empezar a reducir la pobreza, cómo no vamos a creer en todo lo que podemos lograr para adelante.
Somos la generación, que tuvo la valentía de poner la verdad sobre la mesa, juntos nos propusimos sacar el país de donde estaba, de una vez por todas, porque entendimos que había que cambiar en serio para transformar la realidad, para no seguir repitiendo los errores de siempre; los atajos, las soluciones mágicas, la mentira ya sabemos adónde nos llevaron. La verdad es clara, lo que vale, lo que dura no se hace de un día para el otro, se lo hace trabajando un día tras el otro. Juntos estamos cambiando y venimos muy bien, somos la generación que está cambiando nuestro país para siempre, para siempre.