El campo es parte de la solución y no del problema

En el marco del paro del campo generado a partir de la medida del Gobierno Nacional que prohíbe las exportaciones de carnes, fuentes del sector confirmaron a Politica3D que podría faltar carne para la semana que viene.

En este contexto, desde las Fundaciones Pensar,  Alem  y el Instituto Hannah Arendt destacaron el impacto positivo que el sector agroindustrial tiene a la hora de generar puestos de trabajo y dinamizar la economía. En este sentido, advirtieron que “es un error” creer que las medidas restrictivas del Gobierno Nacional afectan a un “sujeto privilegiado”, y agregaron: «Esta medida del Gobierno Nacional termina dañando a centenares de miles de trabajadoras y trabajadores que -directa o indirectamente- forman parte de este enorme circuito productivo».

«Los actores que participan en la agroindustria son muchos más que los productores de granos y carnes: están quienes producen en las economías regionales de todas las provincias, miles de contratistas y transportistas, obreros, empleados especializados que clasifican y empacan los frutos obtenidos de la tierra, o que los industrializan y transforman en diversos productos. También están los proveedores de insumos y genética, profesionales, científicos, etc”, enfatizaron los integrantes de laa fundaciones Pensar,  Alem  y el Instituto Hannah Arendt

Asimismo, desde estas Fundaciones alertaron que “la aplicación de políticas que ya fracasaron con anterioridad terminan impactando negativamente en todas las cadenas, conspiran contra el crecimiento productivo y terminan afectando severamente a la sociedad”. En este contexto, se enmarca el fuerte rechazo al cierre de las exportaciones de carne.

Además, hay que tener en cuenta que las recurrentes trabas al sector desde el Gobierno de Alberto Fernández y la aplicación de medidas impositivas distorsivas atentan contra el crecimiento del propio país: “El sector agroalimentario, pesquero y forestal aportan el 41% de los ingresos tributarios de la Argentina y generan el 60% de las exportaciones, por lo que cada medida que apunta contra el campo implica una herida de muerte a la economía del país», remarcaron desde las fundaciones Pensar,  Alem  y el Instituto Hannah Arendt.

Por otro lado, fuentes oficiales de Juntos por el Cambio subrayaron que «es muy importante hacer hincapié en la búsqueda de consensos para abordar la problemática del sector agroindustrial en forma integral, dejando de lado prejuicios ideológicos, persiguiendo acuerdos y respetando las normas, que son las herramientas esenciales de la democracia”.