El Coronavirus llegó a la Villa Azul: La precariedad es desoladora

Virus, hambre, olvido, desesperación, miedo, pobreza extrema, son palabras que grafican en forma brutal la realidad de cientos de familias que viven en la Villa Azul y en el resto de las villas del Conurbano Bonaerense.

Otro dato de la realidad: En una semana se triplicaron los casos en los barrios vulnerables de la provincia de Buenos Aires, a un punto tal que los vecinos de la Villa Azul fueron encerrados por orden del Gobernador Kicillof.

Próximo a la Villa Azul donde el coronavirus está desnudando las condiciones de pobreza extrema que afecta a las familias, se encuentra la Villa Itatí donde los vecinos esperan con miedo e impaciencia en un contexto de precariedad que es realmente desoladora.

La pregunta inquietante que surge en el medio de esta crisis que afecta a muchas villas de la Provincia de Buenos Aires: ¿El Estado llegó a tiempo?

Para intentar generar una respuesta, podemos tomar la frase del ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, referido al brote en Villa Azul: «Esto es peor que una explosión nuclear».

Una fuente informativa que vive en la Villa Azul afirmó que «en las casas donde falta el agua es donde se registraron mas contagios de coronavirus», y agregó: «Hay que mentir para que te hagan un test «.

Es evidente, tal como ya se viene planteando desde muchos sectores, que hacen falta muchísimos más test masivos, hace falta agua en los barrios carenciados para que las familias puedan cumplir con las condiciones mínimas de higiene, es decir, faltan condiciones dignas para sobrellevar el aislamiento de las familias. Y queda claro que un barrio encerrado por la policía no es el camino adecuado.

IMÁGENES DE VILLA AZUL