Política 3D – Perspectivas financieras para España en 2024: ¿Qué nos dicen los indicadores clave sobre el futuro económico del país?

En el marco de la actualidad internacional, la economía española ha mostrado una notable resiliencia a lo largo del último año, y las perspectivas para el futuro próximo parecen alentadoras. Analicemos algunos datos clave que nos ofrecen una visión más clara de la situación financiera del país.

Evolución del PIB

En 2023, España experimentó un crecimiento anual del Producto Interno Bruto (PIB) del 2,5%, impulsado principalmente por el consumo privado y público, así como por el sector exterior. Aunque la formación bruta de capital mostró una ligera contracción, todos los componentes del PIB han recuperado sus niveles pre-pandemia, excepto la inversión en bienes de equipo y otros productos.

Indicadores Recientes

Los datos del primer trimestre de 2024 continúan reflejando la solidez de la economía española. La afiliación a la Seguridad Social ha crecido, los índices PMI muestran una aceleración y la confianza sectorial y del consumidor ha mejorado. Sin embargo, las exportaciones de bienes muestran signos de desaceleración debido a la débil coyuntura europea.

Inflación y costos laborales

La tasa de inflación se ha mantenido alrededor del 3,1%, con fluctuaciones, mientras que los Costes Laborales Unitarios (CLU) aumentaron un 6% en 2023. Aunque estos datos indican presiones inflacionarias, se espera una relajación en el ritmo de crecimiento de los precios.

Situación financiera internacional

El euríbor a doce meses y el tipo de interés de la deuda pública han experimentado fluctuaciones, pero la tasa de morosidad se mantiene estable. Además, el superávit por cuenta corriente alcanzó un máximo histórico en 2023, impulsado por la reducción del déficit comercial y el aumento del excedente de la balanza de servicios. En definitiva, aunque existen desafíos como la desaceleración de las exportaciones y las presiones inflacionarias, la economía española muestra signos de recuperación y estabilidad. El crecimiento continuo del PIB, la mejora en los indicadores de confianza y la posición sólida en los mercados internacionales son aspectos que respaldan unas perspectivas financieras positivas para España en 2024.