Ciudad de Buenos Aires: Cae una banda que traficaba animales salvajes

La Fiscalía de la Ciudad llevó a cabo tres allanamientos simultáneos en depósitos que proveían de especies silvestres a puesteros de la feria de Nueva Pompeya, ubicada a metros de la Estación Sáenz del Ferrocarril Belgrano Sur. Los operativos fueron realizados en propiedades ubicadas en los barrios porteños de Villa Soldati y Nueva Pompeya y en la localidad bonaerense de Pilar, el pasado 24 de agosto.

El caso se enmarca en una investigación en curso sobre comercio ilegal en la mencionada feria de Pompeya, que encabeza el Fiscal Blas Matías Michienzi, titular de la Unidad Fiscal Especializada en Materia Ambiental de la Fiscalía de la Ciudad. A la ya imputada infracción de uso indebido del espacio público con fines comerciales (artículo 83 del Código Contravencional) se suma ahora el incumplimiento la Ley Nacional 14.346 de protección de los derechos del animal.

A través del Centro Único de Monitoreo de Imágenes de la Policía de la Ciudad, el Fiscal logró individualizar personas y vehículos que se instalaban todos los domingos en las inmediaciones de la feria, y así logró seguir el rastro hasta los depósitos que proveían a los puesteros de especies protegidas. Con estas pruebas, el fiscal solicitó los allanamientos al juez Norberto Tavonanska, titular del Juzgado Penal Contravencional y de Faltas N° 17, quien autorizó las inspecciones judiciales de los tres inmuebles, interviniendo en conjunto en el de la localidad de Pilar el Juzgado Criminal 7 de San Isidro, Provincia de Buenos Aires.

Los tres allanamientos fueron llevados a cabo por Departamento Unidad Federal de Investigaciones Especiales de la Policía Federal Argentina que encontraron jilgueros, cardenales, cabecitas negras, jilgueros rojos, reina mora, rey del bosque, entre otros ejemplares; asimismo se secuestraron especies que eran utilizadas como “llamadores” para atraer y cazar otras aves. En la propiedad de Pilar, se halló un criadero de reptiles del que se secuestraron 133 serpientes de distintas especies (pitones, culebras y boas), además de 33 saurios (gecos, varanos y escincos, entre otros).

Los establecimientos y sus responsables no se encontraban en los correspondientes registros, por lo que el fiscal Michienzi, solicitó la clausura provisoria de los tres lugares. Asimismo se demoró a los presuntos encargados de cada depósito con el objeto de identificarlos y certificar si cuentan con antecedentes penales.

En el procedimiento también participaron con inspectores de la Dirección General de Fiscalización y Control de la Agencia Gubernamental de Control del GCBA. Cabe destacar que el procedimiento contó con la presencia de voluntarios de las ONG Aves Argentinas y Pájaros Caídos, quienes colaboraron en la clasificación y posterior traslado de las especies. Como producto de esta experiencia, todas las especies fueron trasladadas al centro de rescate Delta Terra (de la Fundación Azara). Superados los análisis de rigor y la eventual recuperación de heridas y enfermedades, las especies serán liberadas en sus correspondientes hábitats naturales.

Fuente: Fiscalía de la Ciudad