Costará mucho volver a convencer a los inversores extranjeros de que esta será la última crisis que vivirá la Argentina. Ni siquiera lo creen los propios argentinos que ya hacen fila para mudarse a Uruguay cansados de la política económica del Presidente Alberto Fernández.
En este difícil contexto, la compañía licenciataria de Burger King y Starbucks anunció que quiere irse de la Argentina, pero de momento no encuentra un comprador del negocio. Esta decisión confirma la continuidad del éxodo de empresas que quieren irse de Argentina. Es importante recordar que desde la llegada del cuarto gobierno kirchnerista, ya se fueron grandes empresas como LATAM, Fly Emirates e iniciaron el proceso de salida Falabella, Sodimac, Wallmart, Glovo, entre varias otras compañías que dejaron a miles de argentinos sin empleo.
Volviendo al caso de las empresas Burger King y Starbucks, a partir de la pandemia la compañía inició en varios países un plan de cierre de locales para sostener el negocio, pero en la Argentina la empresa tomó la tajante decisión de comenzar un proceso de venta de todas sus operaciones para irse del país. Pero de momento la compañía no encontró un comprador.
Es importante recordar que en mayo de este año, la licenciataria de Burger King y Starbucks ya había cerrado 13 locales en la Ciudad de Buenos Aires y a través de un comunicado la compañía había informado: «Dado el impacto que la pandemia ha provocado y luego de una evaluación del portafolio de locales, Alsea tomó la decisión de cerrar permanentemente cinco ubicaciones de Burger King y ocho de Starbucks en el país para conservar la sustentabilidad del negocio».
Queda claro que el Gobierno Nacional debe tener en cuenta todo este panorama muy sombrío de la economía argentina, ya que por cada empresa que se va es menos inversión extranjera, es decir, menos dólares, y además este panorama está dejando a cientos de miles de familias sin trabajo, sin ingresos y angustiados.
