En el marco de la gestión al frente del Gobierno Nacional, el Presidente de la República Argentina, Mauricio Macri, aseveró hoy que “voy a hacer lo imposible para llevarles alivio. Estoy seguro de que si seguimos trabajando con estos valores vamos a arreglar la economía y va a mejorar el salario y el empleo”, y ademas remarcó que los argentinos “todo lo que queremos es trabajar, vivir en paz, disfrutar de la convivencia pacífica y no más el conflicto y la prepotencia”, enfatizó el mandatario argentino.
El Jefe de Estado remarcó la necesidad de “abandonar las propuestas facilistas, que nos dicen que sin trabajar las cosas se resuelven”.
Y en ese sentido, advirtió que “trayendo los problemas del pasado otra vez vamos a complicarnos la vida”.
En declaraciones a Radio Sudamericana de Corrientes, Macri afirmó que el conjunto de medidas tomadas por el Gobierno “nos tiene que servir para tener convicción de que vamos a arreglar la economía y que todo este esfuerzo no ha sido en vano”.
Sostuvo que en los más de 270 mil kilómetros que recorrió en el país como Presidente siente “la energía y la convicción de los argentinos de que esta es la oportunidad de cambiar la historia para siempre”.
“Siento que entendimos que volver al camino de los tajos, a la avivada, no nos va a traer lo que soñamos como país, con lo que soñamos dejarles a nuestros hijos”, puntualizó.
Dijo que “hoy, más que nunca, lo que necesitamos es la cultura del trabajo, el país que queremos retomar, la Argentina de nuestros abuelos”.
“Tenemos que salir de esta incertidumbre política, hacer un mínimo consenso entre todos, y eso va a generar alivio en el bolsillo, a bajar la inflación”, sostuvo.
Remarcó que frente al “derroche que encontramos” en diciembre de 2015, el Gobierno trabajó para generar oportunidades de desarrollo en todos los rincones del país.
Mencionó la recuperación de la soberanía energética con la explotación del yacimiento de Vaca Muerta que posibilitó el retorno de las exportaciones de gas y petróleo y la creación de empleos calificados.
Del mismo modo señaló el impulso que han tomado las energías renovables, el turismo; el comercio exterior, que arrojó balanza favorable; la conectividad física y virtual, la puesta en valor y construcción de puertos y aeropuertos y la lucha contra el narcotráfico.
Dijo que las dificultades a superar pasan por erradicar la inflación y consolidar el equilibrio fiscal, así como lo lograron otros países vecinos.
“No puedo aceptar que no lo logremos. Tenemos que sentarnos alrededor de una mesa, como en los ’80, cuando dijimos ‘vamos a vivir en democracia’”, señaló el Presidente.
Sostuvo que la recaudación por impuestos “tiene que alcanzar para la seguridad, la salud, la educación”. “No puede ser que terminemos en inflación y deuda que nos han traído pobreza y exclusión”, añadió.
El Presidente subrayó, además, que dos de cada tres pesos que el Gobierno tomó de préstamos fueron destinados a cubrir la deuda de la administración anterior y el restante para saldar el déficit.
Señaló que los fondos que no se utilizaron están en el Banco Central.
“Yo no soy de los que cree que endeudarse es algo bueno, pero si uno llega y ve que hay que pagar el gasto social necesario, prestaciones, y la plata no está, entonces hay que tomar deuda”, enfatizó.
Remarcó, además, que la pobreza no es un flagelo de los últimos años, sino que viene de hace décadas.
“Lo que hemos hecho es avanzar en la dirección correcta, y no fue en vano el esfuerzo. Hoy estamos mucho mejor parados”, apuntó.
Recalcó que el estudio y las capacitaciones constituyen “la salida” para que las personas que hoy reciben planes sociales puedan reinsertarse en el mundo laboral con empleos de calidad.
