Alberto Fernández festeja que la Argentina logró vacunar al 2% de su población

Sin ninguna autocrítica por el vacunatorio VIP, sin ningún mensaje de condolencias hacia los familiares de los más de 50.000 muertos por el covid-19 en la Argentina, sin ninguna iniciativa válida para los millones de argentinos que se quedaron sin trabajo, el Presidente de la República Argentina, Alberto Fernández, visitará hoy el Partido de Lanús para festejar que la Argentina logró vacunar al 2% de su población. Patético y temerario.

Mientras tanto en el país vecino, Uruguay, el empresario argentino Marcos Galperín (49 años de edad), que dejó la Argentina luego de la victoria del kirchnerismo, anunció que ya lo vacunaron en el país vecino al difundir un mensaje a través de su cuenta oficial de Twitter: “Gracias Uruguay”.

Volviendo a la Argentina, el panorama está muy complicado por varias razones:

1. El gobierno encerró a los argentinos en una cuarentena eterna (fue la más larga del mundo) y como consecuencia de esto destruyó la economía dejando a millones de trabajadores sin empleo.
2. Alberto Fernández dijo que la cuarentena era necesaria para salvar vidas, pero ni eso logró, ya  que la Argentina superó ampliamente los 50.000 muertos.
3. El daño por la cantidad de muertos y por la destrucción de la economía ya está hecho, pero el Gobierno Nacional ni siquiera gestionó bien la llegada de las vacunas, ya que casi no hay vacunas, mientras que nuestros vecinos como Uruguay y Chile están logrando récords de ciudadanos vacunados.
4. Aparte otro dato dramático que desnuda la fragilidad intelectual y la falta de gestión del ´gobierno de los científicos´ al hacer una pequeña comparación con Chile: los aviones que llegan al país vecino llevan 2 millones de dosis, mientras que los aviones de Aerolíneas Argentinas que traen las vacunas a la Argentina traen 300 mil dosis.

Cómo conclusión podemos afirmar lo siguiente: El kirchnerismo no volvió mejor, sino que volvió como siempre: caro y mal gestionado. Total en el fondo la plata que se malgasta en el Estado no la aporta el Gobierno Nacional, sino que la aportan los millones de argentinos con los impuestos.